Todo está diseñado para lograr esa calma, los materiales escogidos son materiales naturales aplicados a mano por trabajadores de la zona. Piedra, cal, madera, hierro,… todo es real y te conecta con el entorno natural en el que se encuentra la casa.
La distribución interior es sencilla y clara, pensada para el uso habitual, la casa mantiene todos sus espacios conectados visualmente entre ellos y con el entorno, jugando con la posición de los huecos hacia el exterior buscando la relación con el paisaje.